La segunda escapada del 2021 nos llevó al Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar. Era nuestra primera visita a Almería y esperamos que no sea la última. El atractivo de sus incontables playas y calas junto a su rica gastronomía lo hace un destino más que apetecible.
Aunque ya sabíamos que la región es de las más áridas de Europa, nos sorprendió ese paisaje semi-desértico del Parque Natural. Muy cerca se encuentra el único desierto ‘oficial’ de Europa: Tabernas.
A lo largo de sus 63 km de costas destacan muestras del pasado activo volcánico, como las dunas fósiles en los Escullos, la playa de los Genoveses y el playazo de Rodalquilar, la lengua de lava fosilizada de la playa de Monsúl o las antiguas chimeneas del arrecife de las Sirenas.
Nuestro alojamiento estaba situado en Retamar, a 17 km de Almería, un apartamento en una zona residencial con piscina comunitaria. Quizás parezca alejado de las playas orientales, pero está bien comunicado para llegar en menos de una hora a casi cualquier sitio.
El primer día decidimos visitar la capital porque no hacia demasiado calor y queríamos conocerla. A primera vista nos pareció un punto decadente, con falta de mantenimiento. Había multitud de locales cerrados fruto de crisis anteriores y también de la pandemia actual. En la oficina de turismo nos aconsejaron acercarnos al Centro de Interpretación Patrimonial donde hay varias salas explicativas de la historia de la ciudad y un vídeo divulgativo muy ameno. Se puede subir a la azotea para tener una visión 360º de la ciudad. Después de un refrescante té moruno, nos dirigimos a la Alcazaba y Murallas del Cerro de San Cristóbal, una imponente fortaleza situada en lo alto de una colina aislada. Nos recorrimos sus largos pasillos, canales de agua y vistosos jardines que recuerdan a la Alhambra de Granada. El recinto ha sido escenario de películas como ‘Cleopatra’, ‘Conan el Bárbaro’ o ‘Indiana Jones y la última Cruzada’, además se convirtió en ‘Lanza de Sol’, la capital del reino de Dorne en la sexta temporada de la serie ‘Juego de Tronos’.
Otro de los atractivos de la capital es el Cable Inglés, un antiguo cargadero portuario de mineral que se utilizó para trasladar mineral de hierro entre la estación de tren y los barcos. Catalogado como Bien de Interés Cultural, revolucionario en su época, pues permitía ahorrar tiempo en el proceso de transporte, dejó de utilizarse en 1973. Está inspirado en las técnicas de construcción de la escuela de Gustave Eiffel.
El principal aliciente para viajar hasta esta parte de la península son sus playas y calas, que rivalizan con las del Caribe aunque algunas son de difícil acceso. He aquí una lista con los detalles e impresiones de las playas más impresionantes del Cabo de Gata.
Cala de los Genoveses – Playa del Barronal – Playa de Monsúl – Cala Carbón
Estas playas, situadas al oeste del San José, tienen restringido el acceso para vehículos privados desde el 14 de junio al 14 de septiembre. Hay varios parkings situados cerca de cada una de las playas con un coste de 5€. El día que intentamos ir, sobre las 11 de la mañana, no pudimos entrar con el coche así que probamos en otras calas menos concurridas. Nos dio un poquito de rabia y pensamos volver a intentarlo, pero quedamos bastante contentos con el resto de calas que visitamos. Posteriormente nos enteramos que por la tarde a las 16:30 ya no gestionan el parking y el acceso es libre. También es posible acceder en autobús desde San José hasta Cala Carbón con paradas en las citadas playas, desde las 10:30 hasta las 19:30, cada hora, con un coste de 2€ por trayecto o 2,70€ ida y vuelta. Para los amantes de las estrellas, ver este cielo estrellado sin contaminación lumínica es un planazo, desde Astronomía Cabo de Gata proponen actividades nocturnas para disfrutar de una noche especial.
Playazo de Rodalquilar
Muy cerca del municipio de Rodalquilar se encuentra esta playa con mayúsculas, paraíso del snorkel, donde sumergirse en sus aguas es casi como estar dentro de un acuario.
Cala de Enmedio
Una preciosa playa a escasos kilómetros de Agua Amarga. Nosotros no fuimos porque nos informaron que el camino estaba fatal y además desde el parking donde dejas el coche hay un ratito de caminata no muy cómoda. En su lugar nos quedamos en la playa de Agua Amarga, que también merece mucho la pena y cuenta con todos los servicios, quitarte la arena de los pies en la ducha no tiene precio.
Playa de los Muertos
Otro de los pecados que cometimos no pisando esta playa, pero es que ¡hay mucho donde elegir! Situada muy cerca del pequeño pueblo de Agua Amarga, está en el top de las más bonitas de Almería con sus aguas de color turquesa y un kilómetro de longitud, eso sí, es peligrosa si sopla el Levante, por lo que la bandera roja ondea muy a menudo.
Arrecife de las Sirenas
Uno de los sitios emblemáticos del Cabo de Gata, muy cerca del Faro, originado por la actividad volcánica. Se dice que el nombre de estas rocas proviene de una colonia de focas monje que se estableció allí y que los navegantes confundían con sirenas. Hay una pequeña cala y era apetecible el baño, aunque el viento que soplaba ese día y el empedrado camino nos disuadió. Es la foto de portada de esta entrada.
Cala Rajá
Siguiendo en el Sur encontramos esta pequeña cala de arena fina, dorada y con algo de grava, entre acantilados y protegida del Levante. El acceso es complicado por un empinado camino de cabras. El agua estaba fría y no estuvimos mucho tiempo bañándonos, pero la belleza salvaje del lugar merece la pena.
Cala de San Pedro
Es una playa de arena blanca con aguas color turquesa que tiene mejor acceso por mar que por tierra. Se puede llegar con kayak desde Agua Amarga o contratando un barco desde Las Negras. Tiene el encanto de que es el asentamiento de una comunidad hippy desde hace décadas. Tiene vegetación en su interior y una fuente natural de agua potable.
Cala del Cuervo
Situada junto al camping ‘La Caleta’, de fina arena blanca aunque para entrar al agua hay piedras. Es recomendable usar escarpines y por supuesto el equipo de snorkel, no vas a parar de sorprenderte en esas aguas cristalinas.
Lugares con encanto
San José
La ‘capital’ del Parque Natural, por ser el municipio más grande, es un pueblo encantador con un paseo marítimo muy recomendable para terminar el día. Hay un pequeña cala cerca, Cala Higuera, ideal para aislarse de multitudes pero también incómoda pues es de piedra, así que nuestra visita fue corta y decidimos refrescarnos en la playa de San José, disfrutando también del snorkel y de una riquísima comida a base de pescaíto fresco.
Mirador de la Amatista
La sensación de contemplar la inmensidad del mar desde las alturas, sentirse pequeño al lado de esa gigantesca masa azul. El Parque Natural vive asomado al mar, admirar esta orografía donde se pierden restos de antiguas lavas en el fondo marino junto a naturaleza salvaje no tiene comparación. Está situado entre La Isleta del Moro y Rodalquilar, cuentan que los atardeceres son inolvidables.
La Isleta del Moro
Un auténtico pueblo marinero con olor a salitre y humedad en cada rincón. Barcos pesqueros fondeados, casitas cúbicas y blancas y el islote con personalidad propia. Degustar el pescaíto frito, calamares y otras delicias en el ‘Hogar del Pensionista’ es una experiencia extrasensorial, por su gastronomía y por las vistas.
Níjar
Un pueblecito blanco, en la lista de los más bonitos de España, alejado del mar y donde el tiempo pasa despacio. Paseamos por sus empinadas calles, observamos sus cuidadas cerámicas y otras especialidades como objetos de esparto y jarapas. El agua tiene también gran importancia en este lugar y le han dedicado un Museo del Agua.
Salinas de Cabo de Gata
En la parte Suroeste del Parque Natural encontramos uno de los humedales salados más extenso de España, hogar de multitud de aves, como flamencos rosados, garzas, garcetas, etc. Hay varios puestos de observación ornitológica desde donde poder disfrutar del espectáculo. Estas charcas son parte también de una de las imágenes icónicas del Parque Natural, la Iglesia de Las Salinas. Y por supuesto su imponente Faro, espectacular balcón al mar sobre escarpados acantilados.
Carboneras
Nos encantó este pueblo blanco con un largo y agradable paseo marítimo donde se ha cuidado el equilibrio entre pueblo pesquero y explotación turística. Entre el enorme paseo marítimo y el castillo de San Andrés se encuentra el Parque Andaluz con un enorme palmeral y bellos jardines. Su principal reclamo, buena gastronomía, playas amplias y un paraje natural inigualable.
También visitamos en este viaje Aguadulce, Roquetas de Mar, Almerimar perdiéndonos en la jungla de los plásticos, Las Negras y Mojácar encantador, único e imprescindible, ya de vuelta a casa. Nos dejamos bastantes cosas en el tintero, algunas por ignorancia, como la Mesa de Roldán (donde también se grabaron escenas de Juego de Tronos), otras por falta de tiempo, como la duna fósil de los Escullos o una visita a uno de los espectáculos de escenarios de películas del oeste como Fort Bravo. De camino a casa pretendíamos visitar la Geoda de Pulpí, una joya de la naturaleza, pero no nos acordamos de reservar con suficiente antelación (entre uno y dos meses). Pero en general no salimos defraudados de esta escapada a la costa de Almería. Os dejamos con un mapa con los lugares que hemos comentado.
Se aprecia un deseo enorme de conocer la zona que se describe; la abundancia de sitios descritos y su precisión representa un auténtico programa de viaje. Enhorabuena!.
Así es, aprovechamos el tiempo todo lo que pudimos. Muchas gracias por comentar!!
Genial reportaje, como siempre.
Gracias chicos, así es más fácil ir a conocer los sitios.🤗
Gracias Silvia!! Qué bien tener a seguidoras como tú. Si vas por allí, esperamos que te resulten prácticos nuestros consejos!
He estado en Mojacar, Roquetas, la alpujarra almeriense, pero nunca en el cabo de Gata, y mira que le tengo ganas!
Gracias por compartir.
Tenemos una variedad increíble de paisajes en España, en Almería el contraste semi-desértico, los plásticos de El Ejido, las formaciones volcánicas y el mares brutal. Gracias por compartir.